.

.

Translate

jueves, 21 de julio de 2011

Editorial El Nacional


El tiempo muerto
Zapatero contrarreloj

El tiempo de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente del Gobierno español se ha acabado, y todos lo entienden así en España y fuera de España, con una excepción: el propio Zapatero que se obstina, contra viento y marea, en llegar hasta un final imaginario que él mismo no es capaz de calcular, importándole poco o nada lo que esa obstinación le cueste a España y a los españoles.
 Zapatero conoce el veredicto de los ciudadanos sobre su gestión de Gobierno, pues la derrota del PSOE en las elecciones regionales no tuvo precedentes, y terminó siendo una especie de referéndum que, en otras ocasiones y con otro protagonista menos frío y menos obstinado, se habría resuelto de inmediato. Pero no, el hombre resiste contra la opinión de todos, esperando no un milagro, sino la aproximación al abismo. Amigos y enemigos han hablado, consejeros y adversarios han coincidido en la necesidad de que el Presidente del Gobierno se vaya y abra el juego de la sustitución. Ciego y sordo, el hombre resiste.
Un diario que lo respaldó en su tiempo, El País de Madrid, se ha unido al coro de las voces que claman por su retiro. Lo ha hecho en un tono que traduce la incertidumbre y el malestar de los españoles frente a un gobernante que ha fracasado y se empeña en llevar ese fracaso hasta extremos inconcebibles.
El lenguaje del editorial con que el diario lo llama a la reflexión y al retiro no deja dudas sobre la gravedad del momento que vive España. Veamos un fragmento de sus planteamientos: "A la fecha nos encontramos con un país amenazado de ruina (atrapado en la vorágine de los mercados financieros desatada sobre Europa), sin perspectiva, con serios problemas de cohesión social y aun territorial, en el que cunde la desilusión entre los ciudadanos sin distinción de ideologías o de clase social. Existen motivos más que fundados para la intranquilidad, patente desde luego tanto en las manifestaciones de los indignados como en los resultados electorales de los recientes comicios".
España, como parte de Europa, está sumida en las turbulencias económicas desatadas por las crisis de algunos países de la comunidad, como Grecia, Irlanda y Portugal. España padece de los mismos males. La economía española y la sociedad en general están ahora bajo serias amenazas. No es, por consiguiente, un tiempo para que el jefe del Gobierno apueste a políticas que han fracasado.
No todo ha sido responsabilidad del gobierno socialista, se reconoce que en gran medida que la situación europea se refleja en España. "Las turbulencias en los mercados de deuda se han cebado en España", sostiene el diario de Madrid. Y lo hace con evidentes amenazas a las empresas de todos los tamaños, sin dejar perspectivas de recuperación a la vista. Desahuciando y sin opciones, Zapatero haría bien en retirarse, lo aconseja El País, como intérprete del sentir de los españoles. Vale la pena oír a los amigos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.